martes, 28 de septiembre de 2010

First World War officially ends as Germany pays off its debt

By Allan Hall, The Daily Telegraph

Almost 92 years after the guns fell silent on the Western Front, the final act of the First World War will be played out on Sunday when Germany pays the last chunk of reparations imposed by the victorious allied powers.

The payment of 59.5 million pounds ($96.9 million Cdn) ends the crippling debt that was the price of one world war and laid the foundations for the next.

Germany was forced to pay the reparations under the Treaty of Versailles in 1919 as compensation to the war-ravaged nations of Belgium and France and to pay the Allies some of the costs of waging what was then the bloodiest conflict in history, in which almost 10 million soldiers died.

The initial sum agreed in 1919 was 226 billion Reichsmarks, a sum later reduced to 132 billion ($35 billion Cdn) - at the time. The bill would have been settled much earlier had Adolf Hitler not reneged on reparations after taking power.
Hatred of the settlement agreed at Versailles, which crippled Germany's Weimar Republic as it tried to shape itself into a democracy following the armistice, was significant in propelling the Nazis to power.

Most of the money will go to private individuals, pension funds and corporations holding debenture bonds as agreed under the Treaty of Versailles, where Germany was made to sign the "war guilt" clause, accepting blame for the conflict.

'Hitler was a great man and the Gestapo were fabulous police': Holocaust denier David Irving on his Nazi death camp tour



Controversial British historian David Irving praised Adolf Hitler as 'a great man' and his Gestapo as 'fabulous policeman' on his shocking tour of former Nazi death camps in Poland. Irving said Hitler was not 'immoral' but was let down by lesser people in the Nazi regime, according to an undercover report by Italian newspaper Corriere della Sera. 'Hitler could be very cruel but he was not immoral. He was just surrounded by "little" people,' the paper said Irving told those on a £1,500-a-head tour he has been hosting.

Surrounded by followers, British historian and Holocaust denier David Irving stands in Himmler's former field headquarter 'Hochwald' in Pozezdrze in Masuria Region, North-East Poland



Irving, who was once jailed in Austria for denying the Holocaust, also told tourists that the German dictator should be compared to Hannibal, the leader of Carthage that fought against and who almost overpowered Rome. The historian said: 'He was like Hannibal. He held the military forces of the rest of the world for six years. Exactly like Hannibal, but nobody has never denied the greatness of Hannibal. 'Hitler was a great man, one of the greatest Europeans for centuries.'

He added: 'The Gestapo were fabulous policemen. They sent 300,000 to Auschwitz and 800,000 to Treblinka.' His comments will be studied closely by Polish authorities and are sure to infuriate Holocaust survivors.

Irving led 11 people from Britain, America, Germany, and Australia around Hitler’s Polish Wolf’s Lair headquarters, where he described German officer Claus von Stauffenberg, who tried to assassinate the Fuhrer as a 'traitor'. And the behaviour of Irving’s guests on the tour has raised eyebrows locally, reports the Italian undercover team. During one private dinner after a visit to the death camps one guest called out to cheers and laughter: 'What a terrible smell. It’s like a gas chamber.'

Critics have slammed the trip around Hitler’s headquarters and the notorious Treblinka death camp referring to it as 'Nazi Travel'.


dailymail online

lunes, 27 de septiembre de 2010

11-S. LA GRAN MENTIRA: hipótesis para una conspiración

 
Sabemos como no se realizaron los atentados del 11 de septiembre; creemos lícito y justificado, a estas alturas, negar la versión oficial de los hechos, por falsa y mendaz. Tras desarmar la tesis oficial, queda solamente establecer una hipótesis alternativa que, necesariamente, es conspirativa (pero no conspiranoica). Se apoya en que tiene en cuenta el estilo de trabajo de los servicios de inteligencia. ¿Por qué partimos de este apriorismo? Precisamente por que no es un apriorismo: el desmontado de la tesis oficial ha implicado necesariamente hayamos visto la acción de agencias federales y servicios de seguridad dependientes del gobierno, tras algunos episodios de intoxicación informativa y creación de falsos culpables. Nadie tendría interés en realizar intoxicación informativa si no estuviera implicado de alguna forma en el complot.
¿Qué servicios podrían estar implicados en este atentado? Vale la pena establecer dos bases de análisis: en primer lugar, cuando se habla de los EE.UU. se tiene tendencia a creer que se trata de un país monolítico en su estructura de poder. La sustitución de Carter por Reagan demostró que existían dos líneas que no pueden ser definidas en términos políticos; no se trata de opciones progresistas o conservadoras, sino más bien de dos actitudes ligadas a dos grupos económicos diferentes: el capital especulativo financiero ligado a las multinacionales y a las “dinastías americanas” y de otro el “dinero nuevo” surgido en la según da mitad de los sesenta al calor de las acumulaciones de capital procedentes de las nuevas tecnologías y de nuevos empresarios. Carter fue un delegado de los primeros, Reagan de los segundos. Bush, su vicepresidente primero, presidente luego y padre del actual presidente, fue el punto de encuentro entre unos y otros. Frecuentemente estas dos líneas se han traducido en orientaciones políticas diferentes. Basta con recordar el cambio de política que se dio de Carter a Reagan. Estas dos líneas no están nítidamente definidas, existen entre ellas interrelaciones y compromisos diversos y, en cierto sentido siguen vivas hasta nuestros días.
Así mismo, tampoco los servicios de inteligencia son estructuras monolíticas. Teniendo en cuenta que en EE.UU. existen casi tres docenas de estos servicios, con un presupuesto global más alto que el de Defensa alemán, hay que ser extremadamente cauto a la hora de hablar de servicios de inteligencia en EE.UU. Por lo demás, dentro de un mismo servicio, existen distintos niveles de conocimiento de las actuaciones. Hoy se sabe que el primer atentado contra el WTC pudo haberse evitado y no se hizo así por que un supervisor del FBI “tenía otras ideas sobre como combatir al terrorismo”. Sin embargo, no albergamos ninguna duda sobre el hecho de que la inmensa mayoría de funcionarios del FBI está de acuerdo en luchar contra el terror de la manera más eficaz y profesional posible respetando escrupulosamente la constitución y la legalidad vigente. Y sin embargo...
Es inevitable que en el interior de cualquier servicio de inteligencia tiendan a constituirse círculos paralelos, con ideas propias, cierto mesianismo y medios, redes de cobertura, presupuestos y posibilidades operativas. Funcionarios de la CIA, de la NSA, del Departamento de Estado, círculos del FBI, estuvieron sin duda complicados en la conspiración. Esto puede deducirse a partir de un hecho fundamental: la conspiración sólo era válida si se lograba mantenerla a cubierto de cualquier investigación y para ello era preciso contar con cómplices en las agencias de seguridad más importantes.
Pero estas agencias eran el brazo operativo, en absoluto los inspiradores de la conspiración, tan solo sus ejecutores tácticos. La estrategia estaba marcada por otros: es inútil desvincular a George Wallace Bush de su padre, sobre todo cuando los principales colaboradores de éste se han convertido en los “cerebros” del primero nueve años después de la Segunda Guerra del Golfo, la que puso a EE.UU. indiscutiblemente en el liderazgo del Nuevo Orden Mundial. Resulta imposible no ligar la Guerra del Golfo (destinada a salvaguardar la influencia americana en el Golfo Pérsico, es decir, a garantizar el suministro de petróleo), de la intervención en Afganistán que apunta hacia los yacimientos petrolíferos del Cáucaso. Se trata de dos momentos de una sola estrategia tendente a controlar los yacimientos y las reservas mundiales de crudo. Y en estos dos momentos estaban presentes: Cheney, Rumsfeld, Powell, y el apellido Bush.
La ejecución del “casus belli” fue relativamente sencilla: se eligió a un “maldito” perdido en las montañas de Afganistán, del que se conocía todo o casi todo y, en especial, su forma de actuar y pensar; no en vano, durante años agentes de la CIA habían colaborado con Bin Laden en la guerrilla arfgana. Durante años, Bin Laden había protagonizado presuntamente algunos atentados en Arabia Saudí y contra intereses americanos y, además, había constituido una red Al Qaeda de la que se decía que estaba relacionada en actos terroristas. Era el culpable perfecto, el chivo expiatorio que además, contaba con la confianza del régimen afgano, primitivo y tosco pero que atribuía –como todo el Islam- un gran valor a la hospitalidad. Así pues Bin Laden era el culpable perfecto.
Faltaban unos culpables “ejecutivos”. El FBI señaló a 19. Solo de apenas tres se sabe algo y de Mohamed Atta, lo suficiente como para saber que su papel como “coordinador” de la operación es inverosímil.
Durante meses el núcleo conspirativo creó falsas puertas en torno a Atta. ¿Cómo lo hizo? Le puso un “gancho”, ¿acaso una mujer que lo citaba en los más variados países que luego tendrían importancia en la trama (Alemania, Chequia, España, diversos países de EE.UU.)? ¿o quizás fue sólo que fue un doble de Mohamed Atta el que viajó por todo el mundo con falso pasaporte y cierta similitud física con el personaje? A fin de cuentas esto ya se hizo con Lee Harvey Oswald cuyo doble se paseó por México y EE.UU. creando pruebas falsas de su implicación en actividades antiamericanas.
Se indujo, no importa con qué subterfugio ni de qué manera, a Atta y a Merwan a que se matricularan en la escuela de vuelo de Florida y aprendieran a pilotar avionetas. Luego basto con encontrar otra excusa para que tomaran el avión que terminó estrellándose contra el WTC. ¿Lo secuestraron ellos? En absoluto: ninguno era terrorista, ni estaba capacitado para abordar una acción terrorista como esa. Sin embargo en alguno de los aviones se sabe que hubo lucha e intento de secuestro. Se sabe poco por que las cuatro cajas negras de los cuatro aviones siniestrados se han perdido.
Lo más probable es que, Atta, Merwan y el resto de los presuntos secuestradores se introdujeran en los aviones como meros pasajeros. Entonces ¿quién secuestró los aviones?
Debió existir otro comando. El verdadero comando terrorista que secuestró los aviones. ¿De donde salió? Todos los grupos terroristas generan en sus inmediaciones excrecencias en forma de disidentes, aventureros, psicópatas que siempre pretenden realizar acciones terroristas de más envergadura que las ordenadas por sus jefes. Manipular a estos grupos es un juego de niños para agentes de los servicios de inteligencia. Probablemente se recurrió a mercenarios o a fanáticos islámicos que creían que su acción iba a servir a determinados objetivos y, sin embargo, sirvió a otros. Pero no eran suicidas, tan solo pensaban conducir el avión a otro aeropuerto y pedir un rescate o la libertad de los palestinos presos en Israel, la retirada judía de los territorios palestinos, etc. La reivindicación es lo de menos, por que, a fin de cuentas jamás tendrían ocasión de plantearlas. El misterio estriba en que ninguno de los pilotos dio la señal de alarma.
Y luego los aviones se estrellaron. El ex ministro socialista aleman Von Bülow, buen conocedor del proceder de los servicios de inteligencia, presentó la tesis de que los aviones fueron teleguiados desde tierra. Se hurtó a los pilotos el control sobre los aviones, se interrumpió sus comunicaciones y, finalmente, se les llevó a estrellar contra el Pentágono y las Torres Gemelas.
¿Por qué no se simplificó la operación y los secuestradores reales fueron presentados como los que pilotaban el avión contra el WTC? Precisamente por que carecían de toda formación como pilotos, se les podía manipular pero no hasta el punto de forzar excesivamente la maniobra. Si advertían que, en lugar de secuestrar un avión, se les pedía que se suicidaran con él, seguramente la operación no hubiera sido viable. Pero luego estaba también la cuestión de los rastros dejados por la operación. Si las sospechas recaían sobre Atta, por el mero hecho de que estaba en el avión, había seguido un curso de vuelo y alguien elaboró el “testamento” que se encontró en la maleta que “casualmente” no fue facturada en el avión, se lograba que las investigaciones no se orientaran hacia los verdaderos secuestradores, lo que hubiera permitido saber algo de su pasado, de sus antecedentes, de las relaciones que hubieran podido tener antes de embarcarse en los vuelos de la muerte.
Y en cuanto a los sistemas de teleguiado de los aviones desde tierra Von Vulgo afirma que se ensayaron ya en los años 70 en EE.UU. Y así debió ser porque los últimos aviones que EE.UU. ha lanzado a la campaña de Afganistán –y que pretende implementar la “Doctrina Rumsfeld”- son los aviones sin piloto, teleguiados desde tierra y que alcanzan con singular precisión sus objetivos sin que ningún pilota corra el riesgo de ser derribado. El equipo de control de estos aparatos pesa unos pocos kilos y puede disimularse en cualquier parte del avión. Por lo demás, un equipo técnico que disponga de los planos de construcción de los aviones, sabe exactamente donde un agente operativo puede colocar un equipo que hurte el control del avión al piloto y lo entregue al equipo de vuelo sin piloto, teledirigido desde tierra o bien con un programa de vuelo que permita estrellarlo contra el objetivo. Que este sistema no es completamente seguro lo da el hecho de que un avión se estrelló contra la pradera de Pensilvania y, que otro de la KLM, línea sobre la que los “iniciados” habían especulado económicamente, no llegó a ser secuestrado.
A un suceso como el atentado contra el WTC inspirado en trabajos literarios y películas, corresponde un modo de ejecución de similar calado.
¿Qué pensaban quienes participaban en la operación? En servir a su país, ante todo; y en obtener buenos beneficios de la operación. Para ellos un solo fin –la hegemonía mundial de los EE.UU. y, con ello, sus buenos negocios- justifica todos los medios. Así se cumple el destino mesiánico de los EE.UU. establecido desde su fundación y que ha hecho que el mismo modelo histórico sea repetido con inusitada frecuencia en los últimos 150 años.  En cuanto a los ejecutores materiales –los agentes de inteligencia que crearon pistas falsas sobre Atta, los que indujeron al secuestro de los aviones, los que distribuyeron pistas, noticias a informaciones falsas, probablemente sean en torno a medio centenar, experimentados en anteriores operaciones, de cuya discreción, eficacia y falta de escrúpulos sus superiores no han albergado la menor duda. Habrán actuado por disciplina y dinero, pero también por afán de aventura, posibilidades de promoción, o acaso por miedo a si negaban su cooperación, serían represaliados. Y, por lo demás, ¿quién asegura que estos agentes viven todavía? Acaso algunos hayan sido asesinados en los momentos de escribir estas líneas con el fin de cortar los eslabones de la cadena que hubiera podido conducir hasta el mandatario de los atentados. Son especulaciones, pero perfectamente viables y con base lógica, al menos para quien conoce las técnicas de actuación de los servicios de inteligencia. Y además esta hipótesis de trabajo es, a fin de cuentas más razonable que la tesis oficial que ha dado lugar a la mitología del 11 de septiembre: un hombre perdido en las montañas de Afganistán, entre pastores y agricultores de amapola, mueve los hilos de células dormidas presentes en todo el mundo, siempre desarticuladas antes de que comentan los atentados. Planifica con todo detalle la selección de 19 comandos suicidas, ninguno de los cuales tiene antecedentes en operaciones terroristas, ni siquiera el militancia islámica. Son preparados, no se sabe donde, y logran pasar desapercibidos para los distintos servicios de seguridad del Estado de medio mundo (incluidos la CIA y el Mosad israelí) que, por lo demás, investigan las redes dean a Bin Laden, como mínimo desde 1994. Esa falta de preparación se nota en que jamás utilizan pasaportes falsos, dejan huellas de todas sus actividades, actúan como un elefante en una cacharrería. Eso no impide que cometan su fechoría y, claro está, al día siguiente sus fotos y sus historiales –solo de tres- aparezcan en los medios como sospechosos. Por canales que nadie logra establecer, se vincula a Bin Laden –que desde el principio niega su participación- con este comando. Nadie sabe cómo ni por qué, ni hay pruebas, pero él es el único responsable de este crimen y de la epidemia de ántrax que seguirá. Se sabe como termina la historia: la USAF bombardea Afganistán, un gobierno títere se sienta al Kabul, tropas americanas han desembarcado en Filipinas en persecución de unos pocos miembros de un grupo terrorista que se vincula con Al Qaeda, desde hace poco, por que solo un año antes nadie había logrado ni querido establecer vínculos entre Abu Sayaf y Al Qaeda. ¿De verdad alguien puede creer una versión tan absurda?
Solamente la reiteración ad infinitum de esa versión ha podido obrar el milagro, verdaderamente aberrante, de elevar lo absurdo a la categoría de verdad absoluta. La mitología del 11 de septiembre ha pasado a ser dogma incontrovertible, ante el cual, quienes mantenemos un mínimo de espíritu crítico, quienes experimentamos horror por las imágenes que vimos el 11 de septiembre y por las que han seguido, sólo podemos sentirnos “outsiders” o ser considerados como locos. Pero vale la pena que exista un poco de locura en nuestra sociedad, y bienaventurada sea si contribuye a restablecer la verdad, sea cual sea.
Por que, hay algo de lo que nadie que nos haya seguido hasta aquí puede dudar: que quienes establecieron la tesis oficial sobre el origen de los atentados del 11 de septiembre nos mintieron a todos. Y que los que fraguaron el engaño, son los criminales inductores de los asesinatos por “razón de Estado”.

© Ernest Milà - Infokrisis

jueves, 23 de septiembre de 2010

Presidente iraní sugiere que EE.UU. respaldó los atentados del 11 de septiembre de 2001

Los dichos de Mahmud Ahmadinejad se produjeron durante la Asamblea General de la ONU. Tras ello, las delegaciones de la Unión Europea abandonaron la sala junto a la estadounidense.



NUEVA YORK.- Durante el desarrollo de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, hizo referencia a un "complot" estadounidense en los atentados del 11 de septiembre de 2001, provocando la partida de la sala de las delegaciones de Estados Unidos y de la Unión Europea.

"Ciertos sectores en el gobierno norteamericano orquestaron el atentado para revertir el declive de la economía norteamericana y su control de Medio Oriente, para salvar al régimen sionista", dijo Ahmadinejad durante su turno para hablar. 

"La mayoría del pueblo norteamericano y otros países y políticos están de acuerdo con este punto de vista", agregó.

"(El atentado) Fue realizado por un grupo terrorista, pero el gobierno norteamericano lo respaldó y sacó ventaja de esa situación", expresó el Mandatario una segunda teoría.

La tercera teoría -continuó Ahmadineyad- es que "un grupo terrorista muy poderoso y complejo, capaz de pasar a través de todas las capas de los sistemas de inteligencia y de seguridad norteamericanos, perpetró el atentado".

Estados Unidos calificó los dichos de Ahmadineyad de "detestables".

"Antes que representar las aspiraciones y la buena voluntad del pueblo iraní, Ahmadineyad eligió de nuevo hablar sin ton ni son sobre teorías de complot y usar palabras antisemitas que son detestables y delirantes", destacó Mark Kornblau, portavoz de la delegación estadounidense en la ONU.

Un diplomático europeo explicó que las delegaciones del Viejo Continente habían abandonado la sala en señal de solidaridad con Estados Unidos.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Evo Morales insinúa que atentado a Torres Gemelas "fue autoatentado"

El Presidente de Bolivia, Evo Morales, señaló que el atentado contra las Torres Gemelas de Nueva York, el 11 de septiembre de 2001, pudo haber sido un autoatentado.

En su declaración, realizada en un acto público en Santa Cruz de la Sierra, donde entregó una sede social para una organización de pueblos indígenas, dijo además que Estados Unidos, al que llama imperio, ha tomado el pretexto del terrorismo y la lucha contra el narcotráfico, para "acaparar recursos naturales".

"En 2001 cuando yo era parlamentario hubo lo de las Torres Gemelas en Estados Unidos (...). Hay algunos libros que circulan que dicen que fue un autoatentado para acusar a algunas regiones y dominar su pretexto de terrorismo para acaparar sus recursos naturales", puntualizó.



Asimismo, criticó al Presidente estadounidense, Barak Obama, por señalar que está retirando tropas de Irak porque en realidad de trata de una "derrota". "Las tropas de Estados Unidos han sido derrotadas en Irak", insistió.

Morales señaló además que la expulsión del embajador de Estados Unidos en Bolivia, Phillip Goldberg, hace dos años, fue una decisión acertada y que no se arrepiente.

"No me arrepiento, a nombre de nuestros antepasados, de los pueblos indígenas que defendieron la soberanía durante la colonia y la república, de haber expulsado al embajador de Estados Unidos (...) Ahora sin la embajada, sin el Fondo Monetario Internacional ni el Banco Mundial estamos mejor", agregó. Goldberg fue acusado de respaldar activamente una intentona separatista en Bolivia dirigida por opositores al gobierno de Morales.

LA TERCERA

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Fidel Castro: El modelo cubano no nos sirve ni a nosotros

El ex presidente Fidel Castro consideró que "el modelo cubano no nos sirve ni a nosotros", según publicó la revista estadounidense The Atlantic en la segunda entrega de la entrevista realizada al líder cubano.

El periodista Jeffrey Goldberg, corresponsal de The Atlantic y que estuvo a cargo de la entrevista, comentó que tuvo dudas sobre si escuchó bien al líder cubano, por lo que consultó a Julia Sweig, analista del Consejo de Relaciones Exteriores, quien lo acompañó en su encuentro con el ex presidente.

Según Goldberg, Sweig matizó que Castro con sus declaraciones "no estaba rechazando las ideas de la Revolución. Lo tomé como un reconocimiento de que bajo 'el modelo cubano', el Estado tiene un papel demasiado grande en la vida económica del país".

El periodista considera que un posible efecto de ese sentimiento sería crear un espacio para que el actual presidente cubano y hermano de Fidel, Raúl Castro, ponga en marcha "las reformas necesarias frente a la resistencia que con seguridad vendrá de los comunistas ortodoxos dentro del Partido y la burocracia".


El Fidel Pro-Sionista

Fidel Castro pidió al presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, que "deje de difamar a los judíos", en la primera entrega de la entrevista que el martes publicó la revista estadounidense.

Castro dijo que el Gobierno iraní debe entender las consecuencias de la teología antisemita "que empezó hace 2.000 años".

"Yo no creo que nadie haya sido más injuriado que los judíos. Diría que mucho más que los musulmanes", agregó el ex mandatario cubano.

cooperativa.cl

viernes, 3 de septiembre de 2010

Extraña Columna muestra el trasfondo de supuesta Ola de violencia Antisemita en Chile

Reflexiones sobre los rumbos de la patria

Gabriel Zaliasnik
Presidente Comunidad Judía de Chile


El Bicentenario de Chile coincidirá con el Día del Perdón, el Iom Kippur, festividad sagrada del pueblo judío. Un día de introspección y de juicio, en que se busca siempre una nueva oportunidad.

De allí que resulte significativo como chilenos reflexionar en este Bicentenario sobre los rumbos de la nación, de manera de recuperar las coordenadas correctas y trazar nuestra hoja de ruta futura. Ello implica revitalizar el sueño de quienes hace 200 años crearon la patria y el sueño de todos aquellos que a lo largo de los siglos han contribuido a engrandecerla.

Un viejo cuento judío habla de dos hombres extraviados que se encuentran en el corazón de un bosque milenario. Uno le pregunta al otro si conoce cuál es la salida, a lo que éste responde que está igualmente desorientado y perdido. No obstante, le señala que sí sabe cuáles caminos no llevan a ninguna salida, y que quizá juntos puedan encontrar el camino.

Los chilenos en el Bicentenario seguimos en muchos aspectos buscando el camino que trazaron los Padres de la Patria, y a la vez sabemos cuáles caminos no conducen a ninguna salida.

Sabemos que en el pasado el camino del enfrentamiento nos alejó de nuestro destino común. Hemos aprendido que la desigualdad y la inequidad educacional nos impiden avanzar. Comprendemos que la destrucción de nuestros recursos naturales no nos lleva a la salida. Igualmente, sabemos que los senderos de discriminación nos desvían y desorientan.

Todavía existen en Chile grupos disruptores de este proyecto de una nación de hermanos; y hay una tendencia general a minimizar la importancia de la existencia de estos grupos. En Chile y el mundo aún hay graves resabios de antisemitismo, subsisten ideologías intolerantes y existen quienes niegan la existencia del Holocausto en la Segunda Guerra Mundial y llaman a la destrucción del pueblo judío y su tierra ancestral, Israel. El Bicentenario debe ser la oportunidad para adecuar la legislación a los estándares internacionales, de modo de impedir todo tipo de incitación al odio, xenofobia, discriminación y antisemitismo. Debemos construir un país donde ser distinto sea visto como un enriquecimiento, y no como una dificultad.

En 1639, el doctor Francisco Maldonado da Silva, primer médico que ejerció en el territorio de Chile, fue condenado a la hoguera por profesar la religión judía. El escritor Marcos Aguinis ("La gesta del marrano") -al igual que el recientemente fallecido escritor chileno Guillermo Blanco ("Camisa limpia")- recrea con rigor histórico su vida y da cuenta de un diálogo entre éste y una mujer prisionera en los mismos calabozos: La mujer le pregunta por su crimen, y él le responde "ninguno". Ella ríe, pues dice: "Todos niegan haber cometido un crimen", a lo cual Maldonado da Silva replica: "Yo no niego la causa de mi arresto, sólo afirmo que no es un crimen". La mujer, perpleja, le consulta si acaso incurrió en bigamia, homicidio u otro delito, y Maldonado da Silva, con calma, le dice: "Nada de eso, soy judío. Sí, judío como mi padre y como mi abuelo".

Hoy, casi cuatro siglos después, en el Bicentenario de la patria, la Comunidad Judía de Chile recibe esta fiesta con la inauguración de una nueva sinagoga y con la instauración de una oración (Tefilá) por el bienestar de la nación, que convocará este domingo a las más altas autoridades del país, aportando así a la amalgama de culturas e historias que dan forma al tejido social de Chile a partir de nuestra milenaria ética, la misma por la cual dio su vida el doctor Maldonado da Silva.

El Bicentenario, como fiesta de la libertad, de la independencia, consagra como valor universal el que en una sociedad plural la función del Estado sea abarcar, y no subordinar, las diferentes culturas. Es un llamado a recobrar la luz, la identidad, la espiritualidad, la unidad familiar y la de todos los chilenos. Es una invitación a retornar a las raíces y recuperar la mística que por períodos puede ser opacada, y a ser protagonistas y defensores de un mundo de tolerancia, de paz y de libertad.

El Bicentenario encuentra a Chile reponiéndose de un terremoto y maremoto que costó la vida a tantos compatriotas y con la alegría del milagro de nuestros 33 mineros del norte, junto al anhelo de su pronto rescate de las profundidades de la tierra. Este Bicentenario encuentra a Chile lleno de vida y de esperanza. Lleno de logros que hunden sus raíces en el esfuerzo de muchas generaciones, lleno de proyectos y de sueños, lleno de hombres y mujeres de bien que sienten en hermandad, una identidad forjada en la historia común, en los desafíos presentes y en la esperanza del futuro.

El Mercurio

jueves, 2 de septiembre de 2010

German bank calls for controversial member to be fired

The German central bank has called on the country's president to dismiss one of its board members over comments he made about immigration and Jews.

The call came after the board met for a second day to discuss the issue.

Earlier, President Christian Wulff said he was concerned Germany's image could be damaged by Thilo Sarrazin's remarks.

Mr Sarrazin has criticised German Muslims, suggested the existence of a Jewish gene, and warned of ethnic Germans being outnumbered by migrants.

The call for his dismissal was an unprecedented move by the Bundesbank - a proudly independent institution - and was taken under unprecedented pressure, says the BBC's European affairs correspondent Oana Lungescu in Berlin.

In his book, Germany Abolishes Itself, Mr Sarrazin states Muslim immigrants refuse to integrate.

In a newspaper interview about the book, he said that "all Jews share a particular gene".

Mr Sarrazin says the book is "very balanced".

On Monday, the Bundesbank, which does not have the right to dismiss Mr Sarrazin itself, distanced itself from his comments, saying his remarks were "discriminatory".

On Sunday, German Chancellor Angela Merkel said Mr Sarrazin's remarks were "completely unacceptable" and urged the Bundesbank to act.


Public opinion divided

The banker faces exclusion from the centre-left Social Democratic Party, but the rank-and-file have sent messages of support, our correspondent adds.

Polls suggest that Germans are divided over whether he should keep his job.

Necla Kelek, a social scientist of Turkish descent who came to Germany at the age of 11, was at Mr Sarrazin's book launch in Berlin on Monday, and welcomes the debate his comments have stirred up.

"We have a real need to talk about these issues in Germany. They can get rid of Sarrazin, but not the debate," she told the BBC World Service's Europe Today programme.

Mr Sarrazin is expected to appeal against the decision.

He rejects any comparison with Nazi views on racial purity.

"I am myself a European mongrel," he said in a newspaper interview, with a family that descends from the Huguenots, Calvinists who fled religious persecution in France in the 17th Century, and a surname that derives from Saracen, the name given to Arab pirates in the Middle Ages.

Germany has more than four million Muslims, most of them of Turkish origin.

Based on advance orders, the book has shot to the top of Germany's sales chart.

BBC News